Por Félix Betances.
No sabemos a ciencia cierta si puede definirse a los
borrachos como una clase, porque a pesar de que las características de los
mismos son idénticas, es decir que todos son iguales y actúan de la misma forma, lo cierto es que éstas solo
permanecen mientras se está bajo los efectos de la borrachera.
Los borrachos se sienten bien mientras lo están y por tanto
siempre procuran volver a embriagarse como si sintieran que solo de esa forma
se obtiene la felicidad eterna, aunque cuando se pasan los efectos,
generalmente viven momentos y experiencias no siempre agradables ya que pierden
sus características de plena identificación.
¿Cuáles características identifican a un borracho?
En cambio, sí se puede definir como tal, a los políticos los
cuales también actúan en forma igualitaria y de manera sincronizada, solo que
cada uno tiene la facultad de organizar las cosas y disponer de sus seguidores
a su antojo y en los momentos y circunstancias que ellos determinen con la manipulación
y la compra de conciencias.
Según lo que se puede apreciar, las diferencias no son muchas
ya que los primeros logran sus objetivos en el simple hecho de beber para
emborracharse y con esto sentirse bien mientras que los otros actúan premeditadamente,
persiguiendo siempre sus objetivos y procurando obtener los mayores beneficios
a costa de los incautos y muchas veces estúpidos adláteres o seguidores.
Para entender esto, basta con ver a los políticos tradicionales
que siempre han manejado al pueblo a su antojo, unos se han hecho millonarios a
costa del pueblo llano, mientras que otros han hecho daños de extremas
dimensiones y no conformes con lo que han hecho del país, lo siguen manejando
de manera muy poco responsable, llevándolo a su antojo hasta a donde quieren.
Son esos, que siempre
han sido malos y que nos han querido hacer ver o sentir que todo estaba bien y
que hoy al ponerse en contradicciones sus intereses, salen diciendo que unos
son los malos y que otros son los buenos.
¿Cuáles características identifican a un político?
El interés de llegar a las posiciones a lucrarse de ellas, el
egoísmo, la mala fe, el engaño, la prepotencia y el interés de siempre pisotear
a los demás, son los que dicen que siempre luchan en defensa del pueblo
En síntesis, la gran diferencia entre borrachos y políticos es
que a los primeros, el “jumo”, se les pasa y todo vuelve a su normalidad hasta
que no se vuelvan a emborrachar, mientras que a los segundos, la maldad y la ambición
los ciega y los deshumaniza cada vez más, no importándoles que al pueblo se lo
lleve el Diablo, con todas las carencias que ellos mismos han provocado.
Otra gran diferencia es que…
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