Una propuesta indecorosa y ofensiva en contra de los trabajadores

Por Félix Betances

Recientemente, el diputado por la provincia de Santiago, y miembro del Comité Político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Víctor Suárez Díaz, propuso que los fondos de pensiones sean entregados a cada beneficiario como un préstamo donde el cotizante pueda tomar hasta un 30% de su dinero acumulado.

El honorable, dio a conocer su propuesta a través de su cuenta de Twitter y en la misma, considera que el 30 por ciento que reclaman los trabajadores cotizantes en las ARS, por motivos de las crecientes necesidades que les ha traído la pandemia del coronavirus, no les debe ser entregado pura y simplemente como debería ser lo correcto, sino en forma de préstamo con intereses.

Puede entenderse que ese señor que “representa al pueblo”, desde una curul a la cual lo llevó ese mismo pueblo,  lo que propone es que las ARS, se conviertan en Bancos y que de una manera criminal, obtengan muchos más beneficios de los que ya obtienen, ya que no es un secreto para nadie que con el dinero de los trabajadores ya acumulado, ellas hacen negocios, de los cuales obtienen grandes y jugosos beneficios.

Es a todas luces, una propuesta descabellada y ofensiva ya que además de improcedente y desconsiderada, es violatoria a las leyes que rigen el sistema bancario de la República Dominicana. Con diputados así, no hace falta tener enemigos.

Debe ser todo lo contrario; las ARS que durante años han tenido pingües beneficios de manera silenciosa, deberían disponer de un aporte voluntario a los trabajadores, en agradecimiento por haber puesto en sus manos, capitales producidos a sangre y fuego con el sudor de sus frentes y de otras partes del cuerpo; como dice el viejo Juan.

Ese Diputado, debe revisar su propuesta y buscar un planteamiento que pueda entenderse como humano y respetuoso, debiendo pedir hasta un “perdón público”, a los dignos trabajadores dominicanos y al pueblo en general.

Los trabajadores no están pidiendo limosna señor diputado, ellos están reclamando un legítimo derecho sobre algo que es de ellos, y que nadie les puede negar. Revísese señor DIPÛTADO.