El obispo de la Diócesis de Baní, provincia Peravia, Monseñor Víctor Masalles, se mostró de acuerdo con penas blandas a las personas que sustraigan fondos públicos cuando servían al país en funciones gubernamentales.
A través de su cuenta de Twitter @VictorMasalles, el religioso consideró que el Código Penal debe penalizar los delitos menores de corrupción con penas de 2 a 3 años.
«Luego, si éstos son graves, para eso están penas acumulativas, que se añaden según el grado de la corrupción», expuso en su cuenta de la popular red social el jerarca católico.
Afirmó que «así es que se castiga la corrupción según el grado en que se comete».
La Fundación institucionalidad y Justicia (FIJ), mostró su desacuerdo con castigar con penas benignas a los corruptos, tras cuestionar a los presidentes de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco y de Justicia, Alexis Jiménez, por defender y justificar esa decisión. Tomado de La Lupa del Sur.
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