Por Félix Betances
Paraíso Barahona.
Gritos lamentos y reclamos se escuchan casi todos los días en el municipio de Paraíso, ante la carencia de servicios médicos por la ausencia de un hospital que satisfaga las necesidades de un pueblo en el que habitan y convergen cerca de 30 mil habitantes, además de los visitantes que ocasionalmente requieren algún servicio medico por diferentes razones.
La situación se repite constantemente cada vez que las personas acuden al único Centro de Salud "no oficial", que allí existe: Programa de Apoyo a Paraíso (PAP) en el cual nunca hay medicamentos ni equipos técnicos adecuados para dar la asistencia a los pacientes, teniendo en muchos de los casos, que salir a pedir a alguien que tenga en su casa alguna pastilla o una que otra inyección, tanto en situaciones normales como en emergencias, especialmente cuando se produce algún accidente.
Los médicos que allí laboran, muy buenos por cierto, hacen de tripas corazón como dice el refrán, ya que viven en carne propia la impotencia de poder dar la solución a los casos que les llegan.
De nada han valido los pedidos y reclamos de la población para que sea terminado un hospital cuya construcción se inició en el gobierno de Hipólito Mejía en el año 2002, al cual Leonel Fernández hizo caso omiso durante ocho años y la misma suerte corrió en los ocho años de Danilo Medina.
Los paraisenses albergan la esperanza de que la suerte les cambie en este gobierno del Presidente Luís Abinader, al cual le piden su urgente intervención, a ver si no corren la misma suerte, la cual hasta ahora ha sido muy mala por cierto.
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