Recordó que en el boulevard de la 27 de Febrero hay un Sistema Inteligente de Tráfico, que fue instalado en 1999 y que conecta unas 300 intersecciones por fibras ópticas, con espiras electromagnéticas que cuentan el volumen vehicular para asignar de manera dinámica el tiempo y la fase de cada semáforo. “Cuando tú pones un agente, rompes con esa inteligencia”, precisó.
El legislador recomendó que hasta se tenga la doble placa y la fotomultas, los agente de la Digesett deben estar antes de la intersección para empezar a fiscalizar y sancionar la línea de stop y el paso de peatón.
No obstante, dijo que se justifica la presencia del agente debajo del semáforo en una situación especial, como un tranque de la vía, un accidente, una marcha o por el paso especial de funcionarios VIP.
“Yo no estoy diciendo que no haya agentes en las vías. Los agentes tienen su función de vigilar, monitorear, fiscalizar y sancionar, pero no sustituyendo los semáforos”, aclaró, durante una entrevista en El Gobierno de la Tarde.
Sostuvo que hasta que no haya un transporte público masivo, colectivo, eficiente, con frecuencia en itinerario, vehículos en buen estado, choferes bien capacitados, seguridad y una tarifa justa, la gente seguirá viendo como al final de año se celebra las ferias vendiendo miles de millones de pesos en un parque vehicular que todos los años crece de un 4 a 7 %.
El diputado manifestó que se puede implementar medidas simples, que no requieren una inversión a tan largo plazo, como son los sistemas de transporte masivos, evitando los dobles parqueos o en paralelo, lo que está establecido en la ley.
Sobre el nivel de ejecución de la Ley 63-17 sobre Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, de su autoría, expresó que sus expectativas no están satisfechas, porque esperaba que la “deuda” acumulada de 30 años iba a empezar a cambiarse de manera estructural para empezar a ver los resultados en unos cinco años.
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