Por Félix Betances
Barahona
La idea de luchar por que se
construya un Teleférico en Barahona, tal y como ya hemos dicho, no es algo que
le surge a alguien de la noche a la mañana, sino algo que viene de más de
veinte años atrás y que fue una promesa incumplida y jamás reclamada o
importantizada por los barahoneros. Suena raro pensar que a nadie le interesara
esa obra, aun sabiendo de la importancia de la misma por varias razones.
Una de esas tantas razones es, que beneficiaría a muchas personas que
poseen bienes inmuebles en las áreas impactadas, además de la creación de
empleos, el aprovechamiento al comercio en general como ya lo hemos dicho y el
impacto al desarrollo turístico de la región, siendo uno de los principales
atractivos que ofrecería Barahona como tal.
Alguien me hizo una pregunta (reiterada) en el sentido de que si tenía yo algún interés particular, en que se construyera ese teleférico en Barahona, a lo cual respondí de la siguiente manera:
Mi interés no es ni puede ser
particular sino general ya que primero; no tengo propiedades ni negocios que pudieran plus valorizarse con la obra, tampoco es una obra que ofrece la
oportunidad de boronear u otorgar prebendas a nadie y quizás por eso a muchos
no les interesa. Tampoco sería jamás un
empleado, por razones obvias.
Se me preguntó de nuevo, por qué me
interesa, a lo que me ví precisado a responder:
“Es que soy una persona demasiado
inteligente, que alcanza a ver el progreso en el futuro y las posibilidades que
tienen los pueblos que cuentan con hombres y mujeres con mentes brillantes y futuristas
que no se conforman con decir: --eso no es posible o “na e n”, como dicen
algunos jóvenes de ahora”.
Convencido de que esta obra es
posible y de que será un hecho, lanzo la idea de que se forme un Comité Gestor,
el cual esté integrado de la siguiente manera:
Un representante de la Gobernación
provincial, un miembro del Clúster Turístico, un miembro de los empresarios y
comerciantes de Barahona, un miembro de la Alcaldía Municipal, un miembro de la
sociedad civil organizada, el Obispo de Barahona y un miembro de las Iglesias
no católicas organizadas.
Dentro de nuestra motivación, creo
que es el primer paso para que los hombres y mujeres de buena voluntad y
cargados de suma inteligencia, que tiene y que creen en su Barahona, empiecen a
demostrar que sí se puede y que en estos tiempos, ya el pasado quedó atrás.
Gracias a las decenas de personas que han manifestado su positivismo ante estas motivaciones.
La motivación sigue adelante, a pesar
de los pesares. ¡Tendremos el teleférico en Barahona!.
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