Durante la celebración de la edición número 60 de La Batalla de la Fe el pasado domingo, el pastor Ezequiel Molina lanzó una crítica contundente hacia la propia Iglesia, señalando que en muchos casos parece estar más centrada en su bienestar material que en la búsqueda de la unción del Espíritu Santo.
"En muchos casos, la iglesia de hoy da la impresión de estar más ocupada en su prestigio y bienestar material que en buscar la unción y guía del Espíritu Santo", expresó el pastor Molina.
En presencia de miles de seguidores durante la tradicional actividad religiosa, que contó con la participación de la vicemandataria, Raquel Peña, el pastor Molina enfatizó que la iglesia del siglo 21 parece estar más interesada en resolver problemas inmediatos y temporales que en predicar y vivir el evangelio. Advirtió que si la iglesia no despierta, podría ser engañada y despertar en el lago de fuego.
"La iglesia del siglo 21 no está interesada en predicar y vivir el evangelio, sino en resolver problemas perentorios y pasajeros. Dios tiene una alerta para ella; si no despierta, será engañada y despertará en el lago de fuego", advirtió Molina.
El pastor Molina insistió en que la advertencia final es que Dios no ha perdido el control, y cada desastre natural y crisis lleva consigo un mensaje. Sin embargo, señaló que la gente se resiste a escuchar estos mensajes, constituyendo una alerta de que estamos llegando al fin.
Molina afirmó que está aquí para advertir sobre las amenazas inminentes y la importancia de prestar atención, ya que, según él, Dios tiene un remanente de hombres y mujeres que han aprendido a obedecerle. Sostuvo que todo lo que estamos presenciando es una alerta final, y destacó la Biblia como la fuente más confiable que ha llegado a la humanidad.
"El dueño de todo lo creado está avisando, diciéndole a
la gente que tomará represalias debido a la corrupción moral y espiritual que
sobrepasa los niveles de tolerancia", concluyó el religioso.
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