Con la puesta en marcha de los operativos para las
repatriaciones de los inmigrantes que se encuentren de forma irregular en
territorio de los Estados Unidos, la ausencia de niños en las escuelas de San
Juan, Puerto Rico, se sintió en más de un 60% esta semana.
Así lo explicó a El
Nuevo Día el secretario designado de Educación, Eliezer Ramos Parés, quien
expresó que las escuelas con “una gran concentración de dominicanos tuvieron
esta semana niveles de ausentismo de más de 60% y algunas casi un 70%”.
Las autoridades de Educación de Puerto Rico han preparado un documento en el que se establece que los directores de los centros educativos deben mantener los portones cerrados y no abrir el plantel a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, en inglés), a menos que haya una orden judicial.
Aunque en esa isla se están buscando soluciones alternas,
Ramos Péres expresó que, de igual forma, trabajan bajo el marco de las normas y
leyes que se emiten desde Washington D.C., por lo que entiende que “ese
protocolo reconoce que esto (intervenciones) pudiera ocurrir, aunque las trabajaremos
con sensibilidad”.
De acuerdo al diario, las medidas a seguir también establecerán que se haría en el centro educativo “si la
escuela se entera de que un niño perdió su papá por su estatus migratorio”.
De acuerdo a El Nuevo Día, solo el día 26, cuando iniciaron
las interdicciones por parte del ICE, se realizaron 47 arrestos, de estos, tres
personas fueron liberadas porque tenían un estatus migratorio regularizado.
Ese diario reportó el día 28 que al menos 11 personas, de 12
que se encontraban detenidas por el Servicio de Inmigración y Control de
Aduanas de Estados, aceptaron regresar a República Dominicana de forma
voluntaria.
Desde el pasado domingo, la página de la ICE mantiene el
comunicado de que conjuntamente con socios federales, incluyendo la FBI, ATF,
DEA, CBP y el Servicio de Alguaciles de Estados Unidos, comenzaron a “realizar
operaciones focalizadas reforzadas en Chicago para hacer cumplir las leyes de
inmigración de Estados Unidos y preservar la seguridad nacional y pública al
mantener a extranjeros delincuentes potencialmente peligrosos fuera de nuestras
comunidades”.
Los dominicanos en la isla han manifestado a diferentes
medios su miedo a la aplicación de esta norma.
0 Comentarios