Lo que nos puede esperar después de la Semana Santa.

 

Por Félix Betances.

Dicho en pocas palabras, al país le puede  esperar, una de dos cosas, a juzgar por el comportamiento de gran parte del pueblo dominicano que por un lado, se ha sentido apoyado de hacer cosas que se entiende no debían hacer, ante la realidad de la situación generada por COVID-19 a nivel mundial.

Un comportamiento totalmente desenfrenado para algunos y avalado por la flexibilización de las medidas restrictivas impuestas por las autoridades, a pesar de la posición externada por personalidades y entidades relacionadas a la salud, para que se mantuviesen aun ciertas medidas que permitieran tener por lo menos el control de La situación.

Las autoridades que por un lado, dieron su brazo a torcer argumentando que el hecho de haber iniciado la vacunación, era ya suficiente para abrir las puertas y por otro lado, sectores del comercio y parte de la propia población con un grado de conciencia todavía muy débil, optaron por irse a las calles, sin pensar en ningún momento en las posibles consecuencias por venir.

Ante la realidad de las cosas, estamos expuestos, primero, a que haya un rebrote masivo de contagios que cueste consecuencias impredecibles con graves y muertos en el país, cuya responsabilidad tendrían que asumir las autoridades, incluyendo los costos económicos, ante la situación que ya tenemos encima y segundo, a que si no se produjese ese contagio masivo como es de esperar, entonces las autoridades dominicanas, se llevarían el gran trofeo de declarar “libre del Virus al país”.

Esperemos a ver qué va a ocurrir, donde aquí hay gente que asegura que aquí ya no hay virus…