La esperada condena de Gutiérrez

 

 

Desde el pasado miércoles, trascendió la noticia de que el exdiputado Miguel Gutiérrez ha sido sentenciado a 16 años de prisión por el tribunal del Distrito Sur de Florida, en Miami, Estados Unidos.

El político fue detenido en mayo de 2021. Antes de admitir su culpabilidad por los cargos de tráfico de drogas y lavado de dinero, un tribunal de Nueva York lo declaró incompetente mentalmente para enfrentar el proceso judicial, argumentando que "había ingerido material fecal".

La confirmación de la culpabilidad y la posterior condena de Gutiérrez son una clara evidencia de la penetración del narcotráfico en los partidos políticos y las instituciones del poder. Se han registrado otros casos de legisladores y políticos, algunos incluso con altos cargos, enfrentando acusaciones similares.

El poder del dinero ejerce su influencia tanto en las contiendas internas de los partidos como en las disputas interpartidarias, como lo demuestra el caso de Gutiérrez, quien fue uno de los candidatos más votados, obteniendo 21,177 votos en las elecciones de 2020, representando la circunscripción uno de Santiago.

Los grupos vinculados al crimen organizado buscan infiltrarse en las instituciones del Estado. Ya no se conforman con tener cómplices dentro de ellas, ya que necesitan el respaldo de las autoridades para perpetrar sus actos delictivos.

El Partido Revolucionario Moderno (PRM), afectado por los casos conocidos hasta ahora, en el último proceso de selección de candidatos para las elecciones de este año, ha tomado medidas para evitar la repetición de este fenómeno. Informaron que enviaron la lista de aspirantes a diversas organizaciones de la sociedad civil, agencias de investigación estatales y a la embajada de Estados Unidos para su evaluación y así excluir perfiles comprometidos con actividades ilícitas.

Ante la alerta generada por lo sucedido en 2020, es necesario reconocer que el partido ha tomado las medidas correctivas adecuadas. Sin embargo, aún se siente la influencia del dinero, como en el caso de los propietarios de bancas de apuestas con representación en el Congreso Nacional. Es crucial que el dinero deje de definir las candidaturas en las competencias internas de los partidos y entre ellos. Ejemplos de países en la región sumidos en crisis por esta causa nos advierten de los peligros que esto conlleva.