La fiscal Mirna Ortiz, integrante de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), aclaró que el caso del asesinato, así como la imputación por corrupción en la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (Omsa), son de acción pública, lo que faculta al Ministerio Público, como órgano persecutor del Estado, a darle continuidad a la acción penal.
La representante de la Pepca también dijo que los familiares de Yuniol no han formalizado su desistimiento ante las juezas del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, que tenía previsto iniciar este martes el juicio de fondo, el cual se aplazó para el próximo 24 de febrero.
La Pepca pidió al tribunal citar a los familiares para la próxima audiencia, a fin de que se garantice su derecho a estar presentes en el proceso judicial.
¿Por qué se retiran?
Entre las razones que citaron para retirarse del proceso, los familiares de Yuniol establecen que la acusación es “corrupta, encubridora y hecha con la única intención de lograr la impunidad de Manuel Rivas, Faustino Rosario, y Eddy Santana Zorrilla”.
Los familiares también arremetieron contra la Pepca. “El Ministerio Público actual, encabezado por Wilson Camacho, a pesar de durar cinco días interrogando a Argenis Contreras, no utilizó esos interrogatorios para ampliar la acusación e imputar a Manuel Rivas, Faustino Rosario y Santana Zorrilla” por el asesinato de Yuniol.
Mantienen la postura de que este grupo fue imputado solo de corrupción por la fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, supuestamente “para protegerlos”.
El juicio y los cargos
Los hechos que dieron origen a este juicio son relatados a continuación: la tarde del jueves 12 de octubre del 2017 se dio a conocer que el profesor Yuniol Ramírez, de 45 años, fue asesinado y encontrado en una cañada en Santo Domingo Oeste. Tenía las manos atadas con cadenas sujetas a un block.
A Ramírez lo reportaron desaparecido el día anterior, luego de haber impartido docencia en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Supuestamente, a este lo mataron porque habría tenido la intención de revelar un entramado corrupto que funcionaba en la Omsa.
Las pesquisas llevaron al arresto de varias personas e inició un caso judicial que se llegó a conocerse en varias jurisdicciones de Santo Domingo.
Cuando al fin se presentó acusación, el Ministerio Público no pudo establecer la vinculación de Rivas con el asesinato de Yuniol, y solo lo acusó por corrupción, junto a Faustino Rosario. Eddy Santana Zorrilla también estaba, pero lo excluyeron.
Por su participación en el crimen de Yuniol, acusaron a Argenis Contreras y su pareja Heidy Peña. También a José Mercado Blanco (El Grande), Víctor Ravelo Campos (El Herrero), Jorge Abreu, y Lilian Suárez Jáquez.
Solo tres en prisión
De este grupo solo guardan prisión El Grande, El Herrero y El Taxista.
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